Bicentenario de la Independencia Argentina
Estimada comunidad universitaria:
¿Por qué se celebra el Bicentenario de la Independencia
el 9 de julio de 1816?
El día de la Independencia de la República Argentina
es una fiesta patria nacional que se celebra el 9 de julio. Este día se
conmemora la firma de la Declaración de la Independencia de la Argentina, el
martes 09 de julio de 1816 en la casa de Francisca Bazán de Laguna, declarada
en 1941 Monumento Histórico Nacional.
La decisión fue tomada el Congreso de Tucumán, que sesionó
en la ciudad de San Miguel de Tucumán en las entonces Provincias Unidas del Río
de la Plata, por la cual el país proclamó su independencia política de la
monarquía española y renunció también a toda dominación extranjera.
Este año se festejará el Bicentenario, para lo cual el
gobierno Nacional y el gobierno Provincial ya se encuentran con los preparativos que
incluyen la remodelación y puesta en valor de la Casa de Tucumán.
¿Cuál es la historia de la Casa de la Independencia?
El Congreso General Constituyente reunido en Tucumán
en 1816 sesionó en la vivienda de una importante familia local.
Pertenecía a
Francisca Bazán, casada con el comerciante español Miguel Laguna y se construyó
en la década de 1760. Era una típica casa colonial, compuesta por tres
pabellones paralelos a la calle, entre los que se encontraban 2 patios,
cerrados lateralmente por habitaciones y galerías y al fondo la huerta. El
frente estaba presidido por el portal barroco con sus columnas torsas o
salomónicas.
El primer patio era el principal y lo rodeaban las
habitaciones de la familia, la sala y el comedor; el segundo patio estaba
rodeado por galerías y cerrado hacia el fondo por el pabellón de la servidumbre
que lo separaba de la huerta, con árboles frutales y el pozo de agua. Estaba
construida con muros de tierra apisonada, tapial y adobes; solo el portal que
abarcaba el zaguán de la entrada y dos porterías había sido construida con
ladrillos. Estos muros estaban revocados con barro y cal. Los techos eran de
tejas sobre un entramado de caña hueca y tierra; la estructura era de cabriadas
de madera y las galería tenían columnas de maderas. Este tipo de construcciones
requerían un continuo trabajo de mantenimiento para que las intensas lluvias no
provocaran su deterioro, lo que explica la decadencia de la casa con el paso de
los años.
Luego de la Batalla de Tucumán en 1812, el ejército
estuvo acuartelado en la ciudad y sus alrededores en dos oportunidades y la
casa fue utilizada como cuartel, por lo que la familia ya no vivía en ella. En
1815, el estado la alquiló para instalar la Aduana, las Cajas Generales y el
Almacén de Guerra y tuvo que realizar costosas obras para repararla,
compensando de esta manera a los propietarios por los deterioros causados con
su anterior uso.
En 1816, ante la falta de edificios públicos
adecuados, se decidió que el Congreso de Constituyentes sesionar en la casa de
los Laguna Bazán. Para ello el gobierno realizó nuevas reformas: se amplió el
salón destinado a las sesiones, demoliendo el tabique que separaba el comedor
de la sala contigua, se repararon los techos del salón ampliado y se
construyeron letrinas. Los muros se pintaron de blanco y las puertas y ventanas
de color azul, para que la casa tuviera los colores de la patria. El gobierno
mandó a fabricar las mesas, sillas, candelabros y todo lo necesario para el
funcionamiento del Congreso.
Este sesiona en la casa entre el 24 de marzo de 1816 y
febrero de 1817, en que se traslada definitivamente a Buenos Aires. Luego la
Casa continuó siendo alquilada para la imprenta del ejército. Poco después la
familia la ocupó nuevamente, alquilando solamente los locales del frente. En
1839 la casa pasó a ser propiedad de Carmen, hija de Gertrudis Laguna Bazán y
de Pedro Antonio de Zabalía, que se había casado con su tío Pedro Patricio de
Zavalía. Estos la reparan de su estado ruinoso, demuelen todas las construcciones
del segundo patio y construyen una nueva cocina.
El lluvioso clima tucumano y las características de
los materiales de la casa contribuían a un deterioro permanente; sumado esto a
los avatares de la economía familiar explica que cuarenta años después la
vivienda se encontrara nuevamente en ruinas. En 1869, el fotógrafo Angel
Paganelli tomó las fotografias del primer patio de la casa y del frente en
estado ruinoso y son las imágenes más antiguas que conocemos de la casa.
Atte.
Dr. Daniel R. Miranda
Rector UMAZA
2016: Bicentenario
Independencia Argentina
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